La queratosis pilaris (también conocida como KP, piel de gallina o piel de fresa) se presenta como pequeños bultos ásperos en la parte superior de los brazos, muslos, mejillas y glúteos. También puede acompañarse de enrojecimiento o hiperpigmentación. En general, la KP se considera una condición inofensiva.
¿Qué causa la queratosis pilaris?
La causa principal de la queratosis pilaris es la sobreproducción de queratina. Cuando se acumula queratina, se forma un tapón escamoso que bloquea la abertura del folículo piloso. Con el tiempo, estos tapones se acumulan y producen los bultos característicos de la KP.
Los factores que contribuyen a su desarrollo incluyen la genética —ya que suele ser hereditaria— y afecciones cutáneas como el eccema, que pueden empeorar la apariencia de los bultos.
Cómo tratar la queratosis pilaris
Aunque se considera una condición crónica sin cura definitiva, existen varios tratamientos que pueden minimizar su apariencia:
1. Exfoliantes hidratantes
Mantener la piel bien hidratada puede ayudar a suavizar los bultos. Se recomienda el uso de cremas espesas que contengan urea (10 %) o ácido láctico, ya que son especialmente efectivas para manejar la queratosis pilaris.
2. Retinoides tópicos
El uso de cremas con derivados de la vitamina A (retinoides) puede estimular la renovación celular y evitar que los folículos pilosos se obstruyan. También pueden ayudar a reducir el enrojecimiento y la hiperpigmentación, algo que los exfoliantes no siempre logran.
3. Tratamientos con láser
En casos más severos, especialmente con enrojecimiento o inflamación notoria, la terapia con láser puede ser una solución efectiva. Los tratamientos como IPL o PDL pueden reducir visiblemente el enrojecimiento.
Medidas preventivas
Además de los tratamientos mencionados, hay hábitos de cuidado diario que puedes adoptar para controlar mejor la KP:
- Evita duchas largas y calientes, ya que pueden eliminar los aceites naturales de la piel.
- Seca la piel con toques suaves en lugar de frotar.
- Aplica crema hidratante inmediatamente después del baño para retener la humedad.
- Usa ropa holgada para reducir la fricción sobre la piel.